Hace 3 años de Luna…

Hoy es el tercer año que el corazón de la Luna fue destrozado en tantos pedazos que jamás logró recuperarlo en su totalidad..
Son tantas cosas que han pasado desde entonces en este corazón herido casi de muerte.. que sólo fueron destellos en la oscuridad los que le dirigieron el camino a la resignación de perder lo que más amó en la vida.. eso pensaba..
El primer año fue un desastre tras otro… un dolor más fuerte que el anterior.. un sufrimiento agotador e inalterable por más que fingiera tener en orden su alma dentro del odio que emanaba de sus ojos.. combinados con el amor que alguna vez sintió por su adorado astro.. y que ya sólo era una careta de apariencias que en el fondo de su corazón no hallaba como disipar el fuego de la amargura que la carcomía en vida.. y no tener que demostrar nada en su exterior.. y guardar su apariencia incólume e inspiradora..
El segundo año.. seguía engañándose eternamente que sería capaz de superar todo y seguir engañando a su corazón.. pero el odio seguía muy arraigado.. quería ser feliz… pero el fantasma de la traición seguía dando vueltas.. una y otra vez.. sin poder recuperar la alegría de alguna vez ocupaba en su corazón que regocijaba de amor y confianza en el ser astral que tanto adoraba… ser que siempre estaba ahí.. y que veía siempre y cada vez le recordaba cuán truhán y traidor había sido.. creando ambientes hostiles con tal de jamás dejar que él se olvidase de su traición.. enrostrándole cada vez que podía el dolor que causó en su ser..
A medida que pasaba el tiempo.. ella fue olvidando el rencor y el odio.. pero sin sacarlo de su alma.. estaba ahí.. intacto.. fresco como el primer día.. a punto de estallar ante cualquier movimiento que delatara su inmensidad llena de rencor.. como cual escorpión esperando su presa.. con su aguijón preparado y listo para dar su estocada final.. una y otra vez… si era necesario..
Así fue olvidando.. teniendo otras prioridades.. conociendo nuevos astros.. o simplemente compartiendo con quienes le entregaban un poco mas de atención y cariño desinteresado que nunca nadie le había entregado.. eso ya fue cambiando cada vez más y cambió su vida y su forma de entender el concepto del amor y la felicidad que antes jamás había cuestionado.. comenzando a entender que el amor no es otra cosa que entregar y recibir… no sólo entregar ciegamente a alguien quien jamás haya dado el concepto real del amor como aprendió a conocer a medida que creía fielmente en que toda su vida había estado errada.. y ahora sólo quería enmendarla…
El año en que se dio cuenta que finalmente nunca había sido amada.. nunca había conocido el amor verdadero.. comprendió que su existencia casi había sido en vano… comprendió que el odio nunca conduciría a la felicidad ni al entendimiento.. que el odio guardado con tanta perseverancia dentro de su alma.. no servía de nada.. y que jamás sería feliz.. comprendió que el amor es otra cosa.. que el amor se gana.. que el amor se entrega.. que el amor se vive y te hace soñar.. te hace ilusionar.. y entrega una felicidad que es limpia y alcanzable.. el odio lo apaciguó.. el dolor lo reparó con el cariño que le entregaban los amigos verdaderos.. y comprendió que el amor estaba ahí.. frente a sus ojos.. y jamás dejaría que el temor a la decepción y a la traición se apoderaran de su vida.. nublando su actitud positiva de ser feliz.. de querer ser feliz.. de volver amar infinitamente a un ser que realmente lo mereciera.. El odio ya no importaba.. aunque aún debía trabajar el perdón.. pero ya había dado el paso más importante… olvidar.. y reconocer que el amor estaba ahí.. frente a sus ojos.. creando unas nuevas ilusiones.. un mundo lleno de felicidad que había estado alejada de ella tanto tiempo…

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Ahora la Luna puede soñar.. puede inspirar como una vez lo hizo.. iluminando cada paso de los amantes eternos.. de las almas soñadoras.. de los ángeles que cuidan la inmensidad de nuestra imaginación..

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